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María Dolores Arenas

Intervención 37

El relojito Cucú

De procedencia alemana y suiza y fechado en el siglo XVIIl, el reloj de cuco se caracteriza por tener una abertura por la que cada media hora sale un autómata, un pajarillo,  que emite un canto semejante a un cuclillo, cuya onomatopeya se resuelve en “Cucú”. (Wikipedia). Visualizar una imagen ayuda a su comprensión.

Una dinámica divertida y participativa con este tipo de relojes sirve de estrategia para compartir en el aula contenidos didácticos y preceptivos en Educación Primaria como las horas del reloj.

El hecho de jugar con un relato siempre despierta la atención en los alumnos y más si ellos se sienten protagonistas de la historia por la interactividad que requieren sus propuestas e interrogantes continuos.

Modo de realizarla

Se puede dibujar en la pizarra una gran esfera numerada para que los niños visualicen y repasen todos los pormenores de las horas.
El animador empieza a leer y cada vez que encuentra un interrogante en la narración insinuado por los tres puntos suspensivos se detiene y solicita la colaboración de los oyentes para que aporten sus soluciones mediante palabras simplemente o accionando con gestos también. Así todo el alumnado se convierte en sujeto activos del relato.

Las sugerencias de las propuestas están resueltas en la dinámica, pero cada cual puede sustituirlas según los propios intereses. El relato aporta ideas para compartir, suprimir o sustituir por conocimientos generales o conceptos de la unidad didáctica en curso, e igualmente para adaptarlo a distintos niveles de enseñanza. Lo importante es convertirlo en juego mediante esa participación general.

Dinámica

Un día Don Samuel llevó a clase
un reloj llamado Cucú.
Quería que los niños aprendieran las horas
y empezar con algo divertido era la forma.

−El relojito Cucú funciona así:
cuando hay que dar las horas,
el pajarito Cucú por la puerta de su casita asoma.
Si es la una cantará “cu-cú” una vez.

Pero si son las dos… ¿qué cantará?…
Pues dos veces la misma canción.
¿Y si son las tres, las cuatro o las seis?…
¿Cuántas veces lo mismo oiréis?…

Y además cada media hora,
siempre que pasa por el número 6,
Cucú sale y canta una sola vez
y corriendo se mete en su casita después.

Los niños impacientes esperaban
que, como explicaba el profesor,
Cucú saliera a dar la media y las horas,
y solo deseaban que asomara sin demora.

Cuando la una llegó Cucú de pronto apareció.
¿Y cómo y cuántas veces la una cantó?…
Cuando tenía que dar las dos…
¿cuántas veces de su casita salió… Y cómo cantó?…

Los niños contentos después aplaudían…
y a Cucú su información agradecían
y miraban al reloj cada momento
a ver quién lo veía salir primero.

¡Qué contento allí vivía el pajarito Cucú!
Le encantaba dar la horas
y disfrutaba al ver cómo ya los niños sabían
hasta los minutos que faltaban para su salida.

Además Don Samuel les enseñó cuáles eran los cuartos, la media.
A contar de cinco en cinco en toda la esfera.
A partir de las12 añadir minutos según rayitas: “y 5, y 6, y10…
Y cómo las 13, las 14 o las 15… también podrían ser.

Con el tiempo los niños a Cucú se acostumbraron
y cuando daba las horas ya no le hacían ni caso.
Entonces Cucú, se puso triste, se enfadó
y veamos lo que pasó.

De repente un día, cuando dar la una tocaba,
en lugar de decir cu-cú, ¿sabéis qué dijo?…¡Ca-ca!
Los niños que tal cosa oyeron
de risa casi cayeron al suelo.

Y esperaban con gran deseo
que diera otra hora con su “ca-ca” de nuevo.
Y a las tres salió Cucú y ¿cuántas veces ca-ca cantó?…
y a las cuatro, qué pasó… ¿cucú o ca-ca se oyó?…

Don Samuel pensó algo enfadado
que Cucú no debía decir ese vocablo.
Entonces lo metió en una caja
y lo llevó al relojero sin tardanza.

Al cabo de unos días lo recogió
y de nuevo a clase lo llevó.
Los niños esperaban con deseo
ver cómo Cucú quedó con el arreglo.

Cucú a las diez de su casita salió
y entonces ¿qué se oyó?: ¿cu-cú o ca-ca?…
Pues no se oyó ni cu-cú ni ca-ca.
Se oyó otra cosa muy rara:

“Tócate la nariz, tócate la nariz”

Y muchas veces lo mismo repetía
hasta que los niños hacían caso a lo que decía.

A las once Cucú de su casita salió
y esto de nuevo se oyó:

“Ráscate la cabeza, ráscate la cabeza”

Y muchas veces esto repetía
Hasta que los niños ese gesto hacían.

A las doce Cucú de su casita salió
y esto de nuevo se oyó:

“Date un palito en tu culito, date un palito en tu culito”

La verdad es que era una risa
oír a Cucú decir tantas tonterías.
El profesor pensó que Cucú estaba loco
y que el relojero lo estropeó del todo.

Don Samuel ese día a su casa lo llevó
a ver si él le daba solución.
Con un palito apretó un tornillito
y esperó a ver qué hacía el pajarito.

Entonces Cucú no dijo ni pío.
Ni a las diez ni a las once ni a las cinco.
De nuevo a clase lo llevó
y a los niños anunció:

− Olvidaos de Cucú para siempre.
Se estropeó de repente.
Pero, cuando menos pensaban los niños,
Cucú asomó de nuevo y esto dijo:

−“Si estáis contentos de volverme a ver
aplaudid todos a la vez”…

“Y si queréis que siga diciendo cositas,
¿me haréis caso cuando yo las diga?…

¿Sí?, pues vamos a ver”:

“Haz cosquillas al compañero”…

“Da una patada en el suelo”…

“Choca la mano al de al lado”…

“¿Quién me echa un besito volando?”…

“¿Cuántas son 3 más 3?”…

“¿Cómo se dice “SÍ” en inglés?”…

“¿Quién va obedecer sin tardar?”…

“¿Quién va a ordenar cada cosa en su lugar?”…

“¿Quién no va a discutir con el compañero?”…

“¿Quién va a leer muchos cuentos?”…

“Que cada uno diga en voz alta lo que quiere oír
que yo, con mucho gusto, os lo voy a repetir”

Entonces el profesor pensó muy decidido:
¿Y si Cucú repitiera lo que explico cada día?
Dicho y hecho en un momento
la idea cobró forma en su pensamiento.

A Cucú le gustó la idea.
Aprender jugando era la mejor manera
Y así, en el día a día,
Cucú lo explicado repetía.

“¿Cuál es la letra más redondita?”…

“¿Cuál es la que lleva un puntito?”…

“¿Qué número parece una sillita?”…

“¿Y el que parece un patito?”…

“¿Quién con sus dedos forma un triángulo?”…

“¿Quién con sus dedos forma un cuadrado?”…

“¿Cuántas patitas tiene una palomita?”…

“¿Y una vaca que anda cojita?”…

“¿Cuántas letras tiene tu nombre?”…

“¿Cómo lo lees si al revés lo pones”…

“¿Te gustaría llamarte así?”… (Samuel o Leumas)
“¡Qué gracia!”

“Y si lo dices solo con la “a”… (Samaal). Con la “e”… ( Semeel)
con la “i… (Simiil). Con la “o”… (Somool). Con la “u”…( Sumuul)”.

“¿Cada uno sabe decir su nombre con la misma vocal?… A ver”…
Y todos repetían su nombre mientras reían sin parar.

−Bueno, Don Samuel, −Cucú concluyó.
Todos saben muy bien lo que yo pregunto.
Es hora de que los niños se vayan a casa a jugar con los papás,
y, tras la cena, un cuento en la cama y a descansar.

Y todos los niños se divertían y aprendían de lo lindo
jugando cada día un ratito con Cucú, el gracioso relojito.

Intervención 36

El Tebeo del ayer

¿Quién no recuerda sus primeros pasos lectores con los Tebeos?

¿A qué personaje favorito del Tebeo rendimos homenaje? La memoria viaja por entretenidos e inolvidables momentos a los que nadie obligaba a buscar porque la lectura de un Tebeo se escogía libremente.

Su recuerdo siempre trasporta a esa edad en que las semillas del placer de leer las sembraron unas hojas de papel que narraban variantes cómicas personalizadas y aventuras abiertas de personajes inolvidables, muy económicas, coleccionables y de venta en puntos de prensa.

El concepto tebeo es un modismo de “TBO” que nació en 1917 y fue de gran difusión. La RAE lo incorporó en su diccionario en 1968 como publicación o revista de historietas gráficas cuyo asunto se desarrolla en series de dibujos.

El gran despegue del TBO está asociado también a las prodigiosas manos de grandes dibujantes que dieron vida e imagen a tantos personajes que contaban divertidas historias cómicas con la finalidad de distraer y alegrar el ocio, jugando con el Humor de la Palabra, del Disparate Absurdo, de Golpe e incluso retazos de Humor Negro (Morfonética del Humor) al tiempo que conseguían seguidores incondicionales de por vida.

La Cima de la Inmortalidad para ESCOBAR, VAZQUEZ e IBAÑEZ

La denominación de Tebeo fue desplazada por el barbarismo o extranjerismo “cómic”, el neologismo de “novela gráfica” o el término “manga” como variantes actuales. La tira cómica aparecía en cualquier publicación de prensa personalizada por dibujantes asiduos y hay que mencionar todo el material dedicado a los Superhéroes cuya magnitud ensancha la gran pantalla.

Habrá que recordar a esos héroes protagonistas, hombres y mujeres, cual publicación sexistas, que ofrecían patrones del momento y respondían al orden establecido. Sus mensajes subliminales estaban solapados por el interés de la acción y la intriga vendría resuelta en próximos números de las semanas posteriores. La espera para aclarar las incógnitas del desenlace garantizaban su venta.

Protagonistas rudos, fuertes, luchadores, valientes, atletas, listos y defensores del bien a ultranza en un mundo de villanos y desalmados. Siempre sabían colocar al lector a su lado, justificando intenciones, métodos y propósitos.

La oferta femenina oscilaba entre cuentos de hadas, patrones femeninos del momento, anteproyectos de una nueva mujer, vanguardismos ligados al cancionero vigente y todo aderezado y endulzado con el amor y el desamor de pareja.

Propuestas para el aula

Del fondo de baúl familiar o bibliotecas se puede aportar material para sugerir un trabajo de aula basado en la lectura de ejemplares para emitir un juicio crítico y constructivo sobre patrones temáticos, prototipos sociales y culturales, que hablan de un ayer y un hoy cambiante, útiles para personalizar opiniones y trabajar tipologías textuales.

La estructura narrativa del material presentado en viñetas cómicas también puede dar mucho juego en el aula, partiendo de unos presupuestos:
• Trabajar con tiras cómicas mudas que visualizan una historia.
• Resumir un mínimo texto personal o dialogal explicativo.
• Utilizar los códigos específicos del tebeo.
• Trabajar con pequeñas tiras cómicas en viñetas de propia creación.
• Facilitar un gestuario que simplifique siluetas y expresiones.
• Integrar un mínimo código verbal o icónico en bocadillos.
• Familiarizar las onomatopeyas como imitación verbal de sonidos.
• Poner orden espacio-temporal a viñetas desordenadas.

El trabajo puede ser por grupos, donde cada uno aporte información, ideas, creatividad y diseño para insinuar y resolver situaciones del dibujo gráfico y todas las propuestas, adecuando el nivel, serán válidas para cualquier edad, cursos superiores o grado de Magisterio.

Bibliografía

Intervención 35

La lectura del ayer

Pixabay

Montañas y montañas de libros recuerdan a miles y miles de lectores que se estremecieron entre sus páginas, vivieron con ellos otras vidas próximas y lejanas y ahí quedaron sus huellas para siempre.

Esta intervención es un homenaje a ese autor creador de ese libro infantil, juvenil o adulto que descubrimos en nuestro paseo lector y a esa obra que, salvándola del olvido, quedó inmortalizada en el pensamiento y en el corazón para muchas vidas.

Despertar el gusto lector hoy no es fácil. Las páginas de un libro lleno de letras quizá no son tan atrayentes como el movimiento colorido de escenas y retos que reclama el juego con el móvil o el ordenador. La competencia se impone y es desleal con la palabra impresa.

Pero el buen lector no nace, se hace y se propicia desde la cuna con quien dispone el oído a la escucha, con ese contador de historias que despierta el interés por ellas y las va regalando, con quien selecciona y facilita un material a la medida de intereses lectores y entonces la magia del propio libro te convierte en sujeto paciente y agente del gusto lector que graba de por vida.

Pero, grande o pequeña, todos tienen su carrera lectora en la narrativa Infantil, juvenil o adulta.

Sirva la intervención como una discreta bibliografía, seleccionada por los participantes en una encuesta, para alumbrar ratos y espacios vacíos de unas vacaciones donde el libro de texto se olvida y el placer de leer se ensancha con historias que hacen vibrar y transportan al pasado, desgranan el presente y fabulan el futuro.

A la pregunta: ¿Qué libro del ayer has salvado en tu memoria?
Los interrogados contestan:
En la primera franja lectora muchos niños resumen su paseo lector por series protagonizadas por un mismo personajes involucrado en distintas aventuras.

Al grito de “hay que leer”, a veces se impone “mi gusto”.

Años de edición, plataformas y formatos, incluso lanzamientos a la gran pantalla avalan el éxito de algunas muestras singularizadas por los lectores, que incluso navegan por páginas centenarias persiguiendo a sus héroes. Cuentan con numerosas reediciones y traducciones internacionales, amparadas por colecciones que aseguran su supervivencia.

Un ayer y un hoy glorioso para Autores e Ilustradores que trabajan unidos al son de un dúo perfecto

Literatura juvenil

Esta franja de edad predispone a perfilar al niño o adolescente buen lector. En realidad el tránsito lo decide el número de páginas y pasar de un libro totalmente ilustrado a un libro con alguna ilustración secuencial y permite más variedad de problemáticas acordes a su personalidad. Los autores se multiplican.

El descubrimiento y la selección puede estar ligada a lecturas declaradas como obligatorias en centros escolares cuyas temáticas y buenos escritores han sabido captar y despertar intereses. Un programas de apoyo familiar, una buena biblioteca de aula y buenos animadores que saben y conocen material para facilitar continuamente el préstamo individual ayudará a potenciar y perfilar ese gusto lector.

En este periodo nacen títulos que quedarán grabados para siempre y con una característica muy destacada: el descubrimiento del Autor que, leído una vez, conquistó su fondo y forma y llega la búsqueda de más obras del mismo. Es el caso de Roald Dahl o Jordi Sierra, los más seleccionados. Y así ese escritor se individualiza en el recuerdo, multiplica adictos con el boca a boca y su obra queda rescatada del eterno olvido gracias a repetidas ediciones actuales y al gran servicio de las Bibliotecas, que recogen hoy todos estos títulos destacados hoy y además los facilitan por préstamos interbibliotecarios.

Algunas muestras saltan de las estanterías de abuelos y padres para llegar a nietos e hijos. Y a pesar de los años, no consienten que las motas de polvo estropeen y malgasten sus páginas.

Recetario literario

• Los libros de lectura nunca pueden ser objeto de examen. No hay que aprenderlos de memoria.
• No al resumen argumental sino a saber sintetizar en cuatro palabras la historia para organizar el pensamiento: “Es un canto a la amistad, a la diversidad”. “Relaciones familiares”. “Querida infancia”. (Sondeo de alumnos).
• No a trabajos sobre libros leídos sino sesiones orales de “Libro fórum” sobre las muestras. Así se expresan opiniones en voz alta, y se entrena y educa el turno de palabra.
• Reunión con padres para proponer plan lector: el fracaso escolar está muy ligado a la falta de animación a la lectura. Leer las mismas propuestas de los hijos facilita espacios para el dialogo, conocimiento, comunicación y desarrollo del pensamiento crítico y constructivo.
• Dotar la biblioteca de aula: Cada alumno dona un libro al trimestre.
30 alumnos × tres trimestres = 90 ejemplares distintos o títulos repetidos. Indispensable que el animador conozca muestra y las haya leído para poderlas seleccionar y recomendar, si no, cómo va a animar. Y al próximo año, más.
• Plantear la Animación a la lectura como asignatura dentro de horario escolar al menos un día a la semana y con un especialista que conozca técnicas, títulos y dinámicas para despertar desde edades tempranas el placer de leer y escribir.

Material y bibliografía para pre-lectores

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Intervención 34

Pollito Pipí se resfría

Pixabay

El famoso cuento de Dora Pastoriza, “Pollito Pipí se resfría”, extraído de su libro “El arte de narrar: un oficio olvidado”, puede convertirse en una muestra de teatro de guiñol para jugarlo en las aulas de infantil accionando a sus protagonistas con unas sencillas marionetas de palo: Pollito Pipí, Patito Cuacuá, Perrita Pachá y Doña Gallina.

Llamamos guiñol, títere o marioneta de mano a cualquier muñeco manejado por la mano humana. En los guiñoles para niños los muñecos aparecen desde abajo, accionados con guantes, dedos o dibujos planos sostenidos por maderas o varillas. Otras marionetas o títeres pueden actuar desde arriba con cuerdas o hilos.

Cualquier texto apropiado a la edad convertido en teatro de guiñol supone una herramienta muy educativa por constituir:
• Antesala del teatro,
• Escuela de dramatización.
• Interpretación del juego simbólico que enseña la vida.
• Implicación en la trama.
• Participación total del público con gestos y palabras.
• Dialogo interactivo entre personajes y público.
• Acercamiento al pensamiento reflexivo.
• Expresión del lenguaje oral y la comunicación.
• Desarrollo emocional y social.

La representación del cuento no tiene mayor dificultad que dos manos, o cuatro, que sujetan las marionetas de palo, que intervienen en el orden requerido, mientras el narrador solicita del público infantil ayuda para participar en los interrogantes que plantea cada momento la historia, siempre insinuados en la dinámica por los puntos suspensivos.

Material

Sirve cualquier dibujo en siluetas planas de los animales protagonistas: pollito, pato, gallina y perro, coloreados o hechos en cartulina de vivos colores, recortados y pegados a doble cara, plastificados y con una varilla larga de madera introducida dentro para su mejor manipulación posterior.

Como escenario puede servir una simple mesa con un mantel para ocultar el cuerpo de quien acciona las marionetas u optar por soluciones conocidas más elaboradas, en cartón o maderas, para sucesivas ocasiones y un lago simulado en el vacío de la mesa.

Dinámica

Pollito Pipí se resfrió

Cuacuá.- Hola, amiguitos, me llamo Cuacuá y soy… ¿qué soy?…
¿Sabéis dónde voy?… Voy a nadar a la laguna.
¿Vosotros sabéis nadar?… ¿Cómo nadáis?… ¡Qué bien!
Pero… ¿A que no sabéis hacer lo que yo hago?
Fijaos: meto la cabeza en el agua y la saco. (Bis)
¿Para qué?… Pensad, pensad, más tarde os lo diré.

Pipí.- Hola, amiguitos, me llamo Pipí y soy… ¿qué soy?…
¿Habéis visto a Cuacuá?… ¿sí?, ¿dónde está?…
¿Me acompañáis a buscarlo?… ¿Por aquí?… ¿Por allá?…
Ahí lo veo. ¿Qué hará metiendo y sacando la cabeza del agua?…
¿Lo sabéis vosotros?… ¿Se lo preguntamos?…
Patito, ¿por qué metes la cabeza debajo del agua?

Cuacuá.- Porque veo pasar bichitos ricos y me los como.

Pipí.- ¡Ahí va! ¿Eso lo sabíais vosotros?…
¿Hay comidita dentro del agua?…

Cuacuá.- Claro. ¿Por qué no vienes conmigo?

Pipí.- Porque mi mamá no quiere que me meta en el agua.

Cuacuá.- Pero ahora tu mamá no te ve. ¿Verdad que no lo ve su mamá?…
Échate al agua. Es lindo.

Pipí.- Sabes, Cuacuá, yo tengo miedo.

Cuacuá.- ¿Miedo de qué? Yo tengo la misma edad que tú y no tengo miedo.
¡Tírate de golpe, Pipí!

Pipí.- ¿Qué hago? ¿Me tiro o no me tiro, amiguitos?…
¿Hago caso a mi mamá o a Cuacuá?…
El caso es que me apetece mucho.
¿Me tiro?… Bueno, me voy a tirar…
¡Socorro! ¡Socorro! ¡Me ahogo! ¡No sé nadar!

Pacha.- Soy la perra Pacha, ¿habéis oído algo?…
Parece como si alguien pidiera socorro, ¿verdad?
¿No es ésa la voz de Pipí?…
¿Por dónde se ha ido?…
¿Por aquí?… ¿Por allá?… (Mover la marioneta a los lados)
¡Es Pipí que se está ahogando! ¿Debo ir en su ayuda?…
¡Aguanta, Pipí! ¡Ya voy!

¡Ay, pobre Pipí! ¡Cómo está!
¿Sabéis cómo se ha caído al agua?…
Lo tendré que llevar con su mamá, ¿verdad?…

Sra. Gallina, aquí le traigo a su hijo.
Está hecho una sopa.

Sra. Gallina.- Muchas gracias, Doña Pacha.
¿Qué le paso a mi hijo?… ¿Alguien lo sabe?…
A ver, habla tú, Pipí.

Pipí.- Me caí al agua, mamá.

Sra. Gallina: ¿Y cómo se cayó al agua?…
¿Dice la verdad?…
¿Quién me dice la verdad?…

Pipí.- Sabes, mamá, yo me metí en el agua para nadar como Cuacuá.

Sra. Gallina.- ¡Ay, Pipí! No me obedeces. Te lo he dicho muchas veces.
Niños, ¿los patitos están hechos para nadar?…
¿Y los pollitos?…
¿Lo ves, hijo?
Los patitos sí que están hechos para nadar
pero los pollitos y las gallinas estamos hechos para andar por tierra.
¿Tenía mamá razón? ¿Sí o no?…

Y ahora, ¿qué vamos a hacer?…
¿Lo secamos?…
Pero me parece que por más que te seque mamá
no te libras de un buen resfriado ¿Verdad?… ¿Qué creéis?…
¿Sabéis cómo va a estornudar y toser Pipí toda la noche?…

Y eso fue lo que pasó. Pipí toda la noche tosió porque se resfrió.

¿Qué le decimos a Pipí?…
¿Qué le decimos a CuaCuá?…
¿Qué le decimos a Pachá?…
¿Qué hará la Sra. Gallina?…

Una de las grandes cualidades de los cuentos es su versatilidad: los podemos leer, inventar y personalizar, dramatizar y también podemos memorizar su trama argumental y luego contarlos con las propias palabras, poniendo alma y vida en la expresión. Pues esta es otra buena muestra cortita y adaptable para la antesala del sueño infantil al servicio de las nuevas generaciones. Formará parte de su memoria de todos los tiempos

Una buena actividad de aula supone facilitar los dibujos de las marionetas, a los niños para colorearlas, recortarlas, montarlas y ellos solos puedan interactuar en clase o contar en familia la historia.

Para aulas de especialidad en Grados de Magisterio, una actividad sugerente es hacer grupos de trabajo para inventar nuevas tramas y representar en guiñol. La propuesta de cada grupo suma y enriquece la creatividad de los demás.

   

Intervención 33

La canción de las piedras

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Esta dinámica trabaja la expresión rítmico-musical coordinada con un instrumento tan sencillo como una piedra que golpea el suelo acompañada del canto de los participantes que entonan cualquier melodía propia del cancionero infantil popular o una rutina elegida para la propuesta.

Su realización persigue un orden regular de secuencias acompasadas y sincronizadas entre golpe y voz de manera que el resultado es un juego divertido de expresión múltiple pues además entrena la psicomotricidad manual, siguiendo las pautas opcionales que inicia la voz del animador.

La propuesta va acompañada de un relato ambientado en la prehistoria que, enlazada con el juego, reclama la atención y sumerge en ese mundo de la narración oral que capta el interés desde edades tempranas.

Accionar y jugar con esta animación no impone franja de edad. Es apropiada desde las aulas de Infantil hasta cursos de primaria y superiores y sirve para descongestionar. En aulas del Grado de Magisterio resulta muy divertida y apropiada para su utilización posterior. También es idónea para llevarla a la práctica en movimientos Juniors y Scouts. Solo necesita insinuar que se acoplen y elegir las melodías.

Con niños pequeños podemos entrenar su conciencia fonética y silábica y trabajar con sonidos trabados de más costosa pronunciación o con onomatopeyas de animales, cumpliendo el objetivo de potenciar el lenguaje y desenredar garganta.

El juego sugerido es muy significativo para su aprendizaje, pues despierta la capacidad de recepción y entrena unas habilidades que son precursoras de los conocimientos que ayudan cada día a memorizar, interpretar, valorar y organizar el esquema mental. Si a ello se suma su gran componente lúdico, el éxito está asegurado.

Material

El juego solo precisa piedras, duras, lisas, ovaladas, de 6×4 cm más o menos, piedras de rio o playa fáciles de conseguir y ya se reservan para siempre, pues el juego será repetido de nuevo por sus connotaciones didácticas y del agrado general. También es interesante encargar las piedras a los niños con anticipación y fecha: cada uno trae una piedra y ello motiva su sentido de la responsabilidad.

Modo de realizarla

Todos los participantes se sientan en círculo, bastante juntos, en el suelo no alfombrado, cada uno tendrá una piedra. El golpe de las piedras en el suelo y pasarlas con golpe al compañero, unido a las voces entonadas de todos, pondrá ritmo y música para cumplir los objetivos deseados.

Si los niños son muy pequeños se pueden reducir los golpes de las piedras y simplemente pasarlas al compañero, siguiendo el modelo y la voz del animador que elige siempre según criterio las frecuencias. El brazo y la mano, dirigidos por el oído, expresaran el movimiento rítmico que persigue cada rutina.

Dinámica

Hace muchos, muchos años,
en la época de los dinosaurios,
los niños no tenían juguetes.
Jugaban con lo que la naturaleza ofreciese.

Un palo, un pequeño animal,
unas semillas, hojas, una flor
y tenían piedras, muchas piedras.
En la naturaleza había un montón.

Con los palos hacían… espadas, bastones, columpios…
Con los animales, a mascotas aprendían a cuidar.
Con las semillas formaban dibujos
y con las flores y hojas, collares para adornar.

Con el barro hacían figuras: pelotas, muñecas,
y al sol las ponían a secar.
Con las pieles de animales ya secas,
las forraban o vestían y a jugar.

Pero con las piedras del campo
inventaron algo sensacional.
Todos los niños, puestos en corro, sentados,
golpeando en el suelo, las hacían sonar.

Así inventaron la música con instrumentos.
Un invento más que sensacional
Después ponían palabras al sonido de las piedras,
golpeando a la vez, las pasaban al compañero y a cantar.

En niños de la prehistoria nos vamos a convertir.
En corro en el suelo nos vamos a sentar.
Cogemos cada uno una piedra en la mano,
damos un golpe, al pasarla al compañero de al lado y a cantar:

“Tengo una muñeca vestida de azul…”
“Debajo un botón ton ton / que encontró Martín tin tin …”
“Cucu cantaba la rana / Cucu debajo del agua…”
“Los pollitos dicen pío, pío, pío…”
(Sintonías propias del cancionero infantil popular)

También podemos entrenar las vocales
mientras hacemos la música con las piedras.
Ahora cada uno dará dos golpes
y las pasará al compañero sin detenerlas.

AA-A EE-E II-I OO-O UU-U

Ahora vienen los números, con golpes y sin moverlas
Una, dos / y tres / cuatro, cinco / y seis.
Siete, ocho / y nueve.
Nueve y una, / diez

¿Escucháis la música que hacen las piedras?…

También podemos entrenar sonidos
y nuestra garganta empezará a despertar.
Algunos parecen difíciles
pero pronto los aprenderá.

Ring, ring –ring Clo, clo –clo Pra, pra –pra Tras, tras –tras

Todos los niños de aquellos tiempos
también con animales solían jugar
y los reconocían por sus sonidos,
Sonidos como éstos… ¿De qué animales serán?:

(Gatitos) (Ovejas) (Perros) (Pollitos)
Miau, miau –miau bee, bee –bee Guau, guau –guau Pi, pi – pi

También podemos entonar canciones
sin pasar las piedras al compañero.
El mismo ritmo seguiremos todos,
cantando y golpeando en el suelo:

“El uno es un soldado / haciendo la instrucción.
El dos es un patito / que está tomando el sol…”
“Zapatero remendón / estira, estira / pam / pam / pam”

Hoy aprendimos también
que los niños de otros tiempos,
aunque no tenían juguetes,
podían pasarlo requetebien.

También sabían hacer otra cosa:
mover el cuerpo con ritmo y bailar.
¿Y si ahora nosotros también bailamos?…
Piedras guardadas, música a toda marcha y… a bailar.

Una música de móvil o casete preparada se puede accionar para sugerir una libre expresión rítmica corporal que rápidamente será aceptada y secundada por todos.

¡A bailar!

Intervención 32

Pipo

Marta Murcia

Dinámica

¡Qué contento estoy!
Me han regalado un perrito.
Es blanco como la nieve
con manchas negras en los ojos,
en el cuello, en el lomo y en el rabito.
Lo voy a llamar Pipo.

¡Pipo, vamos a pasear!
Te presentaré a mis amigos.
¡Pipo, ven por aquí!
¡Pipo, no corras!
¡Pipo, que te vas a perder!
¡Pipo, ven, que no te veo!

Por la calle llegan tres de sus amigos ——- ——- ——- (Nombre de los niños)
Son los hijos del lechero, del veterinario y del panadero.
̶ ¿Estás triste? ̶ le preguntan ̶ . ¿Qué te pasa?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y los cuatro juntos se fueron.

Caminaron cinco calles a la derecha.
Bajaron una hacia abajo y tres a la izquierda anduvieron.
Bajan de nuevo tres y una a la derecha siguieron,
bajando otra vez una
y por diez más en línea recta a la derecha corrieron.

Allí se encuentran con ——– ——– ——–
Son los hijos del policía, del droguero y del banquero.
̶ ¿Dónde vais todos tan serios?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Subieron siete calles hacia arriba.
Por una a la derecha siguieron.
Luego bajaron tres,
una a la derecha volvieron,
y otras tres en cuesta subieron.

Allí estaban ——- ——- ——-
hijos del peluquero, del mantero y del heladero
̶ ¿Dónde vais todos corriendo?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Volvieron una a la derecha.
Bajaron cuatro calles más.
Siguieron cuatro a la derecha.
Bajaron de nuevo dos,
por una a la izquierda se metieron,
y otra vez bajaron una.

Allí ven a ——- ——- ——-
Son los hijos del cestero, del librero y del carnicero.
̶ ¿Dónde vais tan presurosos?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Corrieron por cuatro calles a la izquierda.
Bajaron tres muy aprisa.
Luego una a la izquierda volvieron.
Después bajaron por dos
y por dos más a la izquierda se metieron.

Allí se encuentran con ——- ——- ——-
Son los hijos del bombero, del quesero y del pastelero.
̶ ¿Dónde vais desesperados?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Por dos calles siguieron hacia abajo.
Luego tres a la derecha volvieron.
Bajaron dos calles más.
Cuatro a la izquierda siguieron,
subiendo hacia arriba por una.

Tres amigos más había ——- ——- ——-
Eran los hijos del carpintero, del ferretero y del cristalero.
̶ ¿Dónde vais tan sudorosos?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Giraron por una calle a la izquierda.
Subieron cuatro hacia arriba.
Lo buscaron por siete a la izquierda.
Bajaron corriendo por tres
y por tres más a la derecha se metieron.

Con ——- ——- ——- se encontraron,
hijos del pintor, del tejedor y del cordelero.
̶ ¿Dónde vais todos en grupo?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶¿Te ayudamos a buscarlo?
Y todos juntos se fueron.

Bajaron por dos nuevas calles.
Por cuatro a la izquierda siguieron.
Subieron de nuevo una
y otra vez a la izquierda volvieron,
para subir una gran cuesta: ocho, ni más ni menos.

Muy tranquilos allí estaban ——- ——- ——-
Eran hijos del cartero, del estanquero y del maquinista del tren.
̶ ¿Dónde vais tan agotados?
̶ Se escapó Pipo, mi perro.
̶ ¡Mirad! Por esa calle a la izquierda
¿no asoma el rabo de un perro?

Muy cansados, una a la izquierda volvieron,
aún por cinco calles más hacia arriba subieron
y en la misma esquina,
antes de doblar….
a Pipo lo detuvieron.

¡Es Pipo! ¡Qué alegría!
¡Es Pipo! ¡Es… nuestro perro!
¡Ven, que te voy a presentar…
a los grandes amigos que tengo.
¡Cuánto de tu carrera aprendí!
Desde hoy con todos vas a jugar
y a todos vas a querer
cada día mucho más.

El dibujo preside una nueva actividad para el aula que reclama la atención mediante un sencillo juego que practica habilidades espaciales propias desde el aprendizaje precoz hasta cualquier etapa de formación escolar al ser susceptible de gran implicación por parte de los alumnos.

Todo ello precisa:

• Un dibujo que solo puede y debe visualizar el lector que realiza la dinámica, omitiendo siempre el objeto a describir, aunque sea obvio.
• Un lápiz y un papel cuadriculado para el alumno, que atendiendo a la propuesta del relato, recorrerá las cuadrículas de su hoja, siguiendo las consignas derecha/izquierda, arriba/abajo, Hasta concluir.
La marca roja del dibujo destaca el comienzo del juego.

Los guiones en blanco suponen los nombres de los niños del aula.
Son opcionales igual que utilizar los nombres de los oficios adjudicados. Al final de la narración cada niño los recuerda en voz alta, se anotan en la pizarra, se comentan y así se reconocen profesiones incluso olvidadas o desaparecidas hoy.

La dinámica es apta para todas las edades desde primaria porque en general entrena y refuerza:

• La orientación espacial.
• La direccionalidad del trazo.
• La psicomotricidad fina.
Y al tiempo que supone:
• Un trabajo de plena atención por novedoso.
• Un desafío de precisión.
• Una prueba de destreza y coordinación visomotora.
Y por ello lo hace interesante también para cursos superiores.

Y solo el bien atender, el bien entender y el bien hacer concluirá en un trabajo bien ajustado y significativo.

Actividades post-lectura pueden ser pintar el perrito como se describe u opcional, como insinuar un ejercicio de redacción: “El día en que Pipo se metió en el mar, se perdió en el bosque, se hundió en la nieve”. Siempre presupuestos inusuales propician la creatividad.

Todas las actividades sugeridas en mi página web se han llevado a cabo con alumnos de los Grados de Magisterio en distintas especialidades desde las asignatura troncal de “Literatura Infantil” y desde la optativa de “Animación a la lectura y Taller de Cuentos”, incluyendo los ejercicios de creatividad, por lo que sus propuestas pueden extenderse para la formación de futuros maestros, educadores sociales, animadores de tiempo libre, monitores de actividades extraescolares y campamentos, formadores y docentes en general. Jugar con cuentos y con historias es una actividad que no tiene edad y cuentan con una aceptación total.

Desde estas perspectivas y con trabajos de grupo, se puede sugerir la creación de nuevos relatos siguiendo el mismo método adoptado con Pipo: la búsqueda de una flor o cualquier otro dibujo (de punto de cruz) puede servir para una nueva animación.

Sígueme en Instagram: mariadolorestecuento.

Intervención 31

JUGAR CON POEMAS

ANA PELEGRÍN. Alfaguara

Una manera de entrar en el mundo de la poesía con los alumnos es jugar a convertirlos en poetas que se meten en las líneas de un poema ajeno y, modelando sus hechuras, reinventar el suyo propio ´con unos objetivos y partiendo de unas premisas:

● Buscar la musicalidad con nuevas rimas.
● Trabajar la creación poética innovando argumentos.
● Descubrir la riqueza de las imágenes traducidas en palabras.
● Interpretar los sentimientos ajenos que despierta un poema.
● Traducir los propios sentimientos que genera.
● Comprobar que detrás de cada verso late un intento de buscar la belleza en la expresión e inducir la propia.

Las dinámicas a realizar son para alumnos de la ESO y Bachiller en horas lectivas, formando grupos de 4 o 5 para que entre todos aporten ideas y palabras que resuelvan las propuestas sugeridas.
A criterio propio se deja la selección de cursos de Primaria, pero desde edades tempranas hay que introducir al niño en el mundo de belleza que promete el poeta y si el educador no lleva la poesía al aula se muere.

En aulas de Infantil no debería faltar, en el día a día, un poema secuenciado en estrofas escrito en la pizarra, una canción tradicional para despertar esa memoria que graba para siempre, mientras los niños descubren jugando cómo suenan los sonidos rimados.

Las Nursery Rhymes, en países de habla inglesa, son pequeños poemas y canciones tradicionales utilizadas como experiencia corporal y auditiva para potenciar conocimientos y capacidades. En nuestro país tenemos las propias que forman parte de nuestro repertorio del folklore patrimonial.

Después de trabajar con cada poema, habrá que tener preparada la lectura completa en la web correspondiente de cada autor para conocer y recrearse en los caminos elegidos por su inspiración.

Dinámicas

• Marina Romero:

−Si yo fuera una chicharra
tocaría el violín
ahora mismo
en esta sala.

−Si fuera un grillo cantor
después de comer lechuga
retumbaría
el tambor…

#Si yo fuera Marina Romero

• Añadir hipótesis con el mismo esquema
Tratamiento
Estrofas de cuatro versos de arte menor con rima asonante 1º con 4º .
Primer verso plantea la hipótesis a cambiar y el resto lo componen la oración principal, circunstancias de tiempo y lugar. Ceñirse al sencillo planteamiento

._._._._._._._._._._._._._

• Gloria Fuertes

Los lobos, en el monte;
los pollitos; en el corral;
los peces, en el agua;
los barcos, en el mar.

Los monos, en el árbol;
la paja, en el pajar;
el higo está en la higuera;
la uva, en el parral…

#Todo en su sitio Gloria Fuertes

Construir nuevas estrofa respetando la información: todo en su sitio.

Tratamiento:
Estrofas de cuatro versos que riman asonantados los pares: 2º con 4º.
Verbo omitido, substantivo núcleo y circunstancia de lugar.

Mariquita, escribe, escribe,
y no dejes de escribir,
y no te olvides que “mayo”
siempre se escribe con “y”.

Mariquita, lee, lee,
y no dejes de leer,
porque si no las orejas
pronto te van a crecer.

#Gloria Fuertes Mariquita escribe….

Estrofas para practicar con expresión oral la ortografía en el aula.

Tratamiento
Escribir las estrofas en la pizarra para memorizarlas.
Hacerlas repetir con cada alumno cambiando la palabra con “y” griega con otra con la misma ortografía: “Y no te olvides que yate”… la rima siempre la marca el 2ª verso con el 4º y no se altera.

._._._._._._._._._._._._._._._._._

Alonso Palacios (Recopilador):

Mañana es domingo
se casa Jeringo
con una sultana
que atranca la puerta
con una campana
y barre la puerta
con una manzana

Mañana es domingo

se casa Jeringo
con una mujer
que atranca la puerta
con un cascabel
y barre la casa
con un alfiler…

#Mañana es domingo se casa…

Estrofas recogidas por la tradición con sus peculiaridad de diversidad de sujetos: Perico, Piringo, Casildo… y el juego con el disparate de sus conclusiones.

Tratamiento

Continuar el poema: Se casa con una extranjera, con una chiquilla, con una cantante, con una pintora… acoplando las rimas en los versos 3º 5º y 7º.

._._._._._._._._._._._._._._._._.

• Carlos Reviejo: Un cuento de mar

Allá en una isla
del mar de la Trola,
vivía una princesa
muy triste y muy sola.
Suspiraba llena
de melancolía.

pensando en que alguien
la salvara un día…

Una cierta tarde
mientras paseaba
vio un barco a lo lejos
que a ella se acercaba…

Una cierta tarde…. (viene a salvarla un rey, un millonario, un pirata) Continuar la historia.

#Un cuento de mar Carlos Reviejo

Tratamiento
Continuar la historia siguiendo el modelo con estrofas de cuatro versos con rimas en consonante o asonante, el 2º con el 4º. Puede sugerirse un resumen de la trama porque lo importante es la economía de palabras en el verso y la rima..

._._._._._._._._._._._._._._._._._

• Jose Agustín Goytisolo

Érase una vez
un lobito bueno
al que maltrataban
todos los corderos.

Y había también
un príncipe malo,
una bruja hermosa
y un pirata honrado.

Todas estas cosas
había una vez.
cuando yo soñaba
un mundo al revés.

¿Y QUÉ MÁS HABÍA EN UN MUNDO AL REV´ES?…

Escribir nuevas estrofas de cuatro versos de arte menor con rima asonante 2º con 4º.

#PacoIbañez #RosaLeón: éraseunavezunlobito. Repertorios musicales

._._._._._._._._._._._._._._._._._._._

• Federico Muelas

En el agua del arroyo
la estrella se está bañando.
−Báñate, estrella en el mar.
−No, que las conchas del fondo
me podrían secuestrar.

−Báñate, estrella, en el río.
−Yo no me baño en el río,
que están los juncos pescando
lágrimas para el rocío

¿Dónde más se podría bañar la estrella?… en el lago, en la charca, en la fuente…

Tratamiento
Conservar el planteamiento e improvisar el dialogo imitando las rimas.

#Canción para un poeta. José Luis Perales: homenaje a su muerte.

._._._._._._._._._._._._._._._

Antonio A. Gómez Yedra

Sugiere y ofrece un dibujo para escribir un poema

Versos como niños. Ajonjolí

Tratamiento
Estrofas de cuatro versos, arte menor, con rima asonante los pares o 1º con 4º, al gusto.

Ediciones Hiperión. Ajonjolí: poesía para niños

Porque el poema aprendido ni la edad va a robarlo. Cómo los cuentos.

Margarita está linda la mar y el viento…
Margarita, te voy a contar un cuento… Rubén Darío

En #mariadolorestecuento, cuentos para niños pequeños y bibliografías para todas las edades.

INTERVENCIÓN 30

Pictogramas

Pictocuentos Bruño. Reune doce títulos.
Imágenes Pixabay

Diccionario pictográfico

Niño, Marcos, León, Sol, reloj, cama,  zapatillas, ducha, toalla, slip, pantalones, camisa, silla, calcetines, zapatos, peine, colonia, mamá, vaso, leche,  miel, dientes, mamá, bocadillo, mochila, colegio, amigos,  niños, cuentos, ojos, oídos.

Los pictogramas suponen  imágenes reconocibles que  sustituyen a palabras y se intercalan en un escrito con la intención de favorecer, de una manera lúdica y sencilla, la completa y correcta interpretación de un  texto.

El pictograma, como signo gráfico, cumple muchos objetivos con distintas posibilidades; pero la sugerencia de este recurso  ahora es resaltar su idoneidad para ser aplicado en distintos niveles de educación escolar:

• Primeros lectores

En este etapa educativa todo lo que sorprende atrae de una manera especial. Simplemente unas páginas, salpicadas con letras que alternan con imágenes a color, llaman la atención por la novedad.

La importancia radica en que el recurso del pictograma ayuda a los niños a dar sus primeros pasos en la lectura, porque, acompañados  por el adulto  que lee el código escrito, ellos interpretan la imagen reconocible y consiguen la  información completa del texto. Conscientes de comprender los mensajes,  presumen: “¡Ya sé leer!”

Un abundante material editorial servirá al niño para:
• Despertar la curiosidad
• Estimular la percepción visual
• Implicar la atención audiovisual
• Impulsar la memoria gráfica
• Aumentar el vocabulario
• Fijar con imágenes las nuevas palabras
• Adquirir conceptos
• Trabajar la creatividad
• Descubrir mensajes inteligentes.

• Primaria y Secundaria

En estas etapas de la enseñanza el material que se oferta al alumno varía de interpretación y objetivos. Va a consistir solo en textos escritos que omiten ciertas palabras consideradas muy plásticas y susceptibles de ser sustituidas por dibujos para acomodar en los espacios vacíos.

Un diccionario del vocabulario ayudará a seleccionar esas palabras correctas para ser colocadas por orden, o no, en el lugar conveniente y dar sentido y significado al mensaje del texto.

Los objetivos serán diversos:

• Estimular la expresión plástica personal dibujando la imagen correspondiente.
• Buscar y colocar las imágenes sugeridas mediante el uso de las nuevas tecnologías que propician el manejo de Word.
• Tras terminar la propuesta, visitar las aulas de pre-lectores y jugar con ellos a descifrar los escritos.
• Crear textos sencillos para sustituir palabras por imágenes usando y convocando la creatividad a la par que entrenar otros conceptos de sus áreas de aprendizaje. Puede sugerirse hacer el trabajo en grupos. Sirva como ejemplo trabajar sencillas rimas con colores y frutas:

Roja la manzana
verde el limón
negra la uva
y amarillo el melocotón (Convertirlo en pictograma)…

O buscar las rimas colocando cada cosa en su sitio:

Una nube en el cielo
Un barco en el mar.
Un pájaro en un árbol.
Y color azul y verde… a pintar.

En Instagram, #mariadolorestecuento, videos de cuentos para niños pequeños y bibliografía para todas las edades.

Intervención 29

Las vocales

Siempre al servicio del aula, ahora volvemos la mirada al A, E, I, O, U del programa de Educación Infantil. Etapa decisiva porque allí se siembra y se incuba el gusto por leer y escribir, cuna del pensamiento que define al ser.

Y para construir los pilares del edificio colosal del saber hay un material único e imprescindible: las Letras o Sonidos arbitrarios que la música de cada idioma los hace bailar a su aire formando sílabas, palabras, frases a las que se les pone corazón y cobran vida para copiarla, interpretarla, inventarla y se multiplican y esparcen convertidas en historia, en canto, en poema y en cuento.

Una dinámica apropiada para trabajar la lecto-escritura de iniciación en los niños. El reconocimiento de las vocales mayúsculas y minúsculas constituye los primeros cimientos para la construcción del lenguaje. En paralelo, van llegando sonidos y letras del alfabeto que forman y traban sílabas para crear palabras.

Jugar con el reconocimiento de sonidos y letras dentro del contexto de los propios nombres de los niños supone un recurso perfectamente adaptable a los propios alumnos que cada tutor tiene en su aula. Ideas para llevarlas a la práctica, interpretarlas, completarlas, aumentarlas o sugerir otras nuevas que la propia creatividad personal recrea por considerar idóneas para suscitar el interés y la participación de todos ellos.

Para realizarla, se pueden escribir todas las palabras que aparecen en el relato en la pizarra y en cada interrogante puede salir un niño y subrayar las vocales sugeridas, mayúsculas o minúsculas. También se puede facilitar a cada niño una fotocopia con ellas e, individualmente, desde sus sitios las rodean con un círculo, mientras el profesor, paseando por las mesas, controla y alaba su corrección.

Jugamos con las vocales

Si con las vocales quieres jugar
cuando quieras podemos empezar.

Si sabes el nombre de unas letras que se escriben así: A / a
seguro que en estas palabras las sabes descubrir:

La tiene Alicia.
La tiene Andrés.
La tiene Álvaro.
Y Alba también. ¿Qué letra es?… La A – a

Si sabes el nombre de unas letras que se escriben así: E / e
seguro que en estas palabras las sabes descubrir:

La tiene Ernesto.
La tiene Esther.
La tiene Esperanza.
Y Eduardo también. ¿Qué letra es?… La E – e

Si sabes el nombre de unas letras que se escriben así: I / i
seguro que en estas palabras las sabes descubrir.

La tiene Isidro.
La tiene Inés.
La tiene Iván.
Y también Isabel. ¿Qué letra es?… La I – i

Si sabes el nombre de unas letras que se escriben así: O / o
seguro que en estas palabras las sabes descubrir.

La tiene Olga.
La tiene Oscar.
La tiene Orlando.
Y es muy redonda. ¿Qué letra es?… La O – o

Si sabes el nombre de unas letras que se escriben así: U / u
seguro que en estas palabras las sabes descubrir.

La tiene Ubaldo
La tiene mi uña.
La tiene la uva.
Y la tiene el último. ¿Qué letra es?… La U – u

A – E – I – O –U SON… MAYUSCULAS
a – e – i – o – u son… minúsculas

Ya sabemos las vocales muy bien,
podemos aprender una canción
y con ella jugaremos a adivinar otra vez.

Con la A, A, dabadabadá, tengo yo un vasito de… cris… tal

Con la E, E, debebebedé, tengo yo una hoja de… pa… pel

Con la I, I, dibidibidí, tengo un elefante con… mar… fil

Con la O, O, dobodobodó, tengo yo una caja… de… car… tón

Con la U, U, dubudubudú, tengo niños listos como… Tú y Tú y Tú…

La canción la canta el tutor y en cada secuencia exhibe un objeto del material nombrado y los niños adivinan toda la palabra o terminando las sílabas.

Un juego muy divertido, para estimular el sentido del tacto después, consiste en sentar a todos los niños en la alfombra formando un corro sin espacio entre ellos. Con las manos tras la espalda, se van pasando distintos objetos, sin mirar, para descubrir su material solo por reconocimiento al tacto: un chupito de cristal, una hoja de papel, algo semejante a hueso (lo aprenderán después), un trozo de cartón u otros diferentes para estimular ese sentido.
− Plástico, Piedra, Goma, Madera, Hierro, Metal. Papel de lija…
También pueden reconocer por su figura:
− Pequeñas figuras de juguete de animales, objetos pequeños del aula: goma de borrar, sacapuntas, funda de bolígrafo o cualquier cosa pertinente… Terminan pasando un caramelo de gominola, que puesta en la mano de todos, advirtiendo que no pasen, adivinan y lo comen.

Siempre el descubrimiento de lo que no saben supone un nuevo conocimiento que enriquece su saber para siempre.

Solicitar de cada niño, la víspera, un pañuelo de sus mamás para vendar los ojos en un próximo juego acrecienta el interés por saber cómo será, a la vez que estimula la responsabilidad a la hora de recordar “los encargos”.

Secuencia musical

Intervención 28

La adivinanza

Baraja. Dolores Bernal. Ed. Ciencias de la Educación

En la línea de seguir jugando en el aula con las rimas contamos con las Adivinanzas, un recurso para todas las edades.

La adivinanza es un tipo de acertijo con enunciado generalmente en forma de rima. Encierra un enigma sencillo en el que se describe una cosa de forma indirecta para que alguien lo adivine. (Wikipedia):

Oro parece,
plata no es.
Quien lo adivine
lo puede comer….. Plátano

Cuenta con juegos de palabras, habilidades y recursos del lenguaje como la polisemia, la sinonimia, asociación de palabras o sonidos, que incluyen pistas, se apoya en metáforas, comparaciones y su componente lúdico, rítmico y educativo las hace idóneas no solo para el público infantil.

La adivinanza reclama su importancia con su presencia en un contenido específico del currículo de aprendizaje de Educación Infantil: Área de descubrimiento y exploración del entorno, así como primeros cursos de Primaria: Con su uso se formulan “Las profesiones“.

En el tema de “Las profesiones”, la adivinanza pasa a ser protagonista por sus descripciones objetivas sencillas e ingeniosas, fáciles de resolver y su lenguaje rimado facilita la memorización.

Dinámica

Una propuesta de juego en dos modalidades:

• Para aulas de Infantil y primaria

Hay tantas adivinanzas cuantos niños en el aula. Conforme van saliendo, podemos anotarlas en la pizarra para seguir jugando después y si los niños ya saben leer, pueden repartirse escritas en una cartulina para que ellos las formulen a los compañeros.

El juego de las profesiones

Una profesión es el oficio en el que cada uno trabaja
cuando se hace mayor.

Jugando, jugando con las adivinanzas,
¿sabemos de quién hablamos?

Para hacer teatro o películas
siempre me necesitan ———————————— Actor/Actriz

Frutas, legumbres, verduras
yo las cultivo y tú las disfrutas ———————– Agricultor

Si una casa tú quieres tener,
ladrillo a ladrillo, la puedo hacer ——————- Albañil

Para comprar, cocinar y cuidarte
siempre estaré dispuesta al instante ————– Ama de casa

Proyecto edificios, chalets o plazas.
Regla, papel y lápiz me acompañan ————— Arquitecto

Por el espacio navego
y a la luna llegué el primero ————————– Astronauta

Si hay fuego, ponemos la sirena
y acudimos los primeros a la escena ————- Bomberos

En bares y restaurantes
sirvo comida y bebida al instante ————— Camarero

Con mi gran camión
el rey de la carretera soy ————————— Camionero

Si te gusta cantar y bailar
escúchame y gozarás ——————————– Cantante

Trabajo con martillos, sierras y clavos.
Fabrico sillas, mesas y armarios ————— Carpintero

Voy de casa en casa.
Traigo mensajes de tierras lejanas ———– Cartero

Pedaleo sin parar
a ver si a la meta puedo llegar —————– Ciclista

Si te gusta comer bien
a cocinar te enseñaré —————————– Cocinero

Si con mi coche llego el primero
seguro que gano el premio ——————— Corredor de coches

Curo muelas y dientes,
pero, si te cepillas bien,
los tendrás más fuertes ————————— Dentista

Trabajo con hilos de luz, enchufes y cables
y cuido que no me den calambres———— Electricista

Si te gustan los cuentos, las historias,
con placer las escribo de memoria ———– Escritor

Si tu grifo gotea o no cierra bien
lo arreglo la mar de bien ————————- Fontanero

Doy patadas al balón
para meter siempre gol ————————— Futbolista

Cuido pollitos, cerdos, caballos
y en la granja yo trabajo ————————- Granjero

Puedo surcar los mares
a bordo de barcos muy grandes. ————- Marino

Si tu coche, moto o bicicleta se estropea
la arreglaré y quedará perfecta. ————- Mecánico

Te veo cuando estás malito
y te curo con mucho cariño ——————– Médico

Puntada tras puntada,
hago trajes de calle o de gala —————– Modista/Sastre

Con piano, guitarra o violín
mi música es un placer para ti ————– Músico

Si tu pelo quieres cortar, lavar y secar
conmigo puedes contar ————————- Peluquera

Trabajo en el río o en el mar
y hoy en mi caña o en mi red,
¿cuántos caerán ———————————– Pescador

Pinto paredes o pinto cuadros.
Soy artista pincel en la mano —————- Pintor

En coche, en moto o andando
cuido que no pase nada malo ————— Policía

Defiendo una red
para que la pelota no puedan meter —– Portero

Me ves en televisión
y anuncio qué viene a continuación —– Presentador

A leer y escribir, sumar y restar,
con cariño, te puedo enseñar —————- Profesor

Si levantas la mano, yo pararé
y donde quieras te llevaré ——————– Taxista

Con cremas, martillo y clavos
reparo cualquier calzado ——————— Zapatero

Muchas profesiones conocemos.
Repasando las recordaremos.

Podemos escribir los nombres en la pizarra, confiados a la memoria de los niños o fotocopiados todos en un folio y ellos los identifican. Excusa y pretexto para seguir entrenando las grandes destrezas o macrohabilidades lingüísticas: saber hablar, escuchar, leer y escribir, preceptivas en este periodo escolar.

Un itinerario podría ser:

• Nombres que empiezan por A, B, C, Z…
• Numerarlos y decir de qué letra hay más.
• Qué instrumentos necesita tal o cuál profesión.
• Definir qué es un cartero, un…
• Dibuja qué te gustaría ser de mayor y escribe el nombre.
• Si tenemos la baraja de “Profesiones” podemos identificar cada carta y jugar con ella.

Una sugerencia didáctica y divertida es hacer una colección de adivinanzas en el aula. Los niños van trayendo escritas por su propia letra una adivinanza de casa en la que naturalmente intervienen los padres. Es cuestión de preparar un papel con formato para repartir, una cajita para almacenarlas, jugarlas en clase y después compartirlas con aulas paralelas del mismo ciclo.

• Para cursos superiores

La dinámica de Las profesiones no se agota en Educación Infantil y Primaria. La sugerencia alcanza a realizarla con alumnos de cursos superiores a los que se les facilita una lista de ellas, se reparte y, organizados en grupos de 4 o 5, entrenan la rima poética, inventando con mínimas palabras nuevas adivinanzas, cuya característica especial sea la sencillez idónea para jugarlas con un público concreto, incluso con ellos mismos.

Y un objetivo final de esta actividad es que después sean los propios alumnos los que bajen a cursos inferiores a proponer el juego a los pequeños y, tras preparar el material adecuado a discreción, ellos sirven de inductores y moderadores.

Será una fiesta para los niños y una experiencia para los mayores verse involucrados en la responsabilidad de “Estar al frente de” en lugar de “Mirando a”, al tiempo que experimentan “Pensar en”… hacer la vida agradable a los demás.

Un Chupa chup o unas gominolas celebrarán con los niños:

El juego con las adivinanzas en las profesiones.