Intervención 54
Los audiovisuales

Un audio-visual es aquel medio de comunicación que emite los mensajes mediante la
la combinación de imagen y sonido formando un todo integrador. Los elementos que utiliza son la imagen, el sonido, la música y las palabras.
Para un niño pequeño el audiovisual supone una toma de contacto con el mundo exterior al hacerle llegar palabras simultaneadas con la imagen, resultando un recurso fácil para el entretenimiento visual y un medio cómodo para entrar en contacto con el cine.
La industria del celuloide facilita productos para edades tempranas adaptados a sus necesidades y exigencias. Son susceptibles de manipulación doméstica y practican intereses didácticos propios de estimulación precoz, vocabulario, memorización por repetición, descubrimiento y gusto por personajes e historias, comprensión de sencillas tramas, secuenciación temporal, incluso incipiente dualismo bien/mal.
Niños del ayer han recargado su primera infancia con programas televisivos infantiles familiarizándose con personajes de dibujos animados como Teletubbies (1997), Winnie the Pooh (1988), Dora exploradora (2000), Pocoyó (2006), La casa de Micky Mouse (2006), Peppa Pig (2010). Los capítulos son de aventura cerrada, sintonías y personajes fijos que viven distintas situaciones del devenir cotidiano y se posicionan mediante su actitud, plantean acertijos o simplemente ilustran vocabulario, secuenciación espacial o temporal con respuestas a cuestiones educativas.
Así también alimentaron el imaginario infantil esos productos con dibujos personalizados, convertidos en series de animación programadas para espacios infantiles con sucesos cerrados en cada emisión: Los Pitufos (1981), La abeja Maya (1978), El pato Donald (1983), Masha y el oso (2009), La patrulla canina (2013). Y veteranos se hicieron los divertidos Tom y Jerry para todos los públicos que este año cumplen sus 85 felices años.
Las historias secuenciadas por capítulos semanales de “Heidi” (1976) y “Marco” (1977). traen la ruptura con la tradición gráfica-figurativa de los dibujos animados. Todo un clásico que pasará a la posteridad como la serie infantil que reunió a la familia frente al televisor fiel a la cita de la próxima entrega tras la intriga propuesta en la última emisión.
El cine y el vídeo han relegado el material de grabaciones magnetofónicas que reproducían cuentos de todo tipo para ser escuchados por el niño en radio o cassette. Pero la voz del cuentacuentos no puede ni debe nunca sustituir a la del adulto en la hora del cuento. Los lazos de afectividad, atención y dedicación que se establecen entre educador e infancia, mediante la oralidad, son insustituibles
Walt Disney fue uno de los primeros en comprender la importancia de la televisión y en valerse de los progresos de la tecnología para difundir el dibujo americano. Hacia los años sesenta, inició un cine, muy bien elaborado, con total libertad en adaptación y manipulación de relatos populares y de autor, consiguiendo familiarizar, salvar del olvido y refrescar títulos de todos los tiempos. Gracias a él, muchos de los adultos cuentan con recursos para la hora del cuento. El problema es que se queden ahí y no manejen la literatura actual.
La literatura infantil ha proporcionado, en alto porcentaje, historias cinematográficas, tras sufrir procesos complejos de adaptación, convirtiendo el mundo de la animación con dibujos en un género masivo, solicitado y conocido por el niño, con títulos que forman parte del patrimonio de la humanidad y están en la memoria de todos los tiempos. Ahí viene el desfile de Cenicienta, La Bella durmiente, Alicia, Peter Pan, La sirenita, Blancanieves…

La música, el color y el dinamismo serán componentes básicos de sus películas, debido a que el público infantil necesita acción constante con un mínimo de escenas estáticas. Su juego con distintos planos mantiene en vilo a los niños. Tras su muerte continua su escuela.
A través del cine, el niño se puede familiarizar con títulos, autores y obras maestras de todos los tiempos y puede ser un estímulo futuro para acudir al libro original. El problema es la comodidad visual, ambientada y placentera que despierta la imagen y por efecto contrario aleja del libro.
El dibujo japonés rompe con la tradición gráfica de Disney por su especial técnica narrativa. Se caracteriza porque no son narraciones completas, sino que precisan nuevos episodios; abarcan múltiples direcciones y géneros: ciencia-ficción, policiacos, sentimentales o historias atentas a los fenómenos de los cambios de costumbres del momento. Su captación es heterogénea y masiva. Bola de drac (1986) marcaría historia, constituyendo un clásico del mundo de animación. (Sanz Marco C. Doctorado, 2005).
Cualquiera muestras aquí aludida sigue estando vigente hoy día en cualquier gran plataforma de reproducción, Lo que un día sirvió al niño de ayer es indiscutible que volverá a ser utilizado para el niño de hoy de la siguiente generación. Qué será que cualquier producto del pasado nos parece mejor porque lo hicimos nuestro.
Actividades para el aula.
Para trabajar la expresión oral participativa o la expresión escrita:
• Escribir en un folio los audiovisuales preferidos en la propia infancia.
• Montar un fórum de opinión valorando y defendiendo.
• Proyectar capítulos elegidos para crítica constructiva y propuesta educativa.
• Practicar cualquier tipología textual entre personajes:
– Dialogal: Conversación telefónica entre Peter Pan y la Bella durmiente…
– Retórico: un pequeño poema dedicado al personaje preferido para salvarlo del olvido.
– Narrativo: redactar una ensalada de cuentos mezclando protagonistas:
“Y Cenicienta invitó a su boda a…, quién fue, qué le regalaron, qué hicieron… (Detallar)
• Construir una historia contada al momento con mínimas palabras entre los alumnos cambiando al segundo de interlocutor:
“Un día Bambi y Dumbo salieron a pasear y…(otro alumno) se encontraron con Alicia, que dijo: (otro)… y ¿se ha escapado Shere Khan?… (otro). Entonces Bambi pensó…
Actividades variadas que van a servir para entrenar objetivos concretos de sus áreas de aprendizajes, pueden resultar interesantes y divertidos porque su temática juega con el factor sorpresa, contando con que todo lo que sorprende atrae la atención siempre.